Puente de Fernando VII (Poyales del Hoyo)
Se sitúa en un ancestral cordel ganadero, algo más abajo de la cl-501 (en el tramo entre Arenas y Candeleda) y unos cientos de metros antes de acceder a Poyales del Hoyo, cuando la carretera sortea las bravas aguas del río Arbillas (afluente del Tiétar). Cauce abajo, tres enrabietadas cascadas se despeñan contra un cauce estrecho y torturado.
Justo a continuación, apenas se divisa el rústico puente de Fernando VII, casi sepultado entre sauces y alisos, y en la vecindad de pinos, brezos y enebros. Para acceder a sus pies, avanzamos unos metros por la cl-501 en dirección a Poyales y pasada la primera curva, nos descolgamos por una pista de tierra a mano izquierda que permite alcanzarlo en un suspiro.
En el pretil de aguas arriba una lápida con una escueta leyenda nos descubre el porqué de su nombre: “Edificado bajo el reinado de Fernando VII en 1830”.