Candeleda

Llamábase antes Candeleda de las Ferrerías. Obtuvo Carta de Villazgo en 1393, de manos del rey de Castilla Enrique III el Doliente, que cede sus derechos a Rui López Dávalos, derechos que al caer posteriormente en desgracia, transfiere Juan II a D. Pedro de Zúñiga. Tuvo castillo pero de él, solo queda el nombre de una plaza.

Candeleda. Plaza del castillo

Asentada en la falda sur de la Sierra de Gredos en la denominada “Andalucía de Ávila”, tiene un clima tropical y está surcado su término por las más puras y abundantes aguas procedentes de los picos del Sistema Central, gozando de además de pintorescos paisajes y piscinas naturales.

Sus principal medio de riqueza, además del turismo, lo conforma su núcleo ganadero y agrícola que es el más importante del Valle del Tiétar, adquiriendo gran relevancia sus cultivos de tabaco, pimientos y espárragos.

Su casco urbano está ubicado a 430 m de altura sobre el nivel del mar. Limitando con la comarca de la Vera en la provincia de Cáceres, goza de un variadísimo “microclima”. Sorprenden los naranjos y palmeras en las calles y la peculiar arquitectura de la zona, con bellas casas hermosamente engalanadas de flores en sus balcones.

Monumentos:

Iglesia parroquial, erigida en honor de la Asunción de Nuestra Señora, de estilo gótico rural, del siglo XV que cuenta con un magnífico retablo de cerámica talaverana del siglo XVI.

La Ermita de San Blas

La picota o rollo, símbolo de independencia en la jurisdicción civil y criminal de la villa.

La cabra montés, ubicado en el cruce de carreteras hacia Arenas de San Pedro, Oropesa y Madrigal de la Vera.

La casa de las flores” (1862). En la Plaza Mayor. Sus ocho balcones están llenos de macetas repletas de flores todo el año. En su interior está ubicado el Museo del juguete.

El Santuario de la Virgen de Chilla, a 5 Kms. del centro del pueblo.

Las Gargantas de Candeleda

Garganta de Santa María con dos preciosas piscinas naturales: Charco Palomas y Charco Carreras. También en Candelela se encuentran la Garganta de Chilla con las charcas “Cueva del Oso” y “Los Riveros”,  La Garganta de Tejea  y La Garganta de Alardos, ésta última en los límites de las provincias de Ávila y Cáceres.

Referencia literaria

Camilo José Cela, en su libro de”Judíos, moros y cristianos” decía…

Candeleda tiene de todo, es como el arca de Noé de los tres reinos de la naturaleza, a saber: el animal, el vegetal y el mineral. En Candeleda se cría el tabaco y el maíz, el pimiento para hacer pimentón y la judía carilla, sabrosa como pocas. En Candeleda, a la vista de las nieves perpetuas, florecen el limonero, el naranjo y el almendro. Candeleda muestra fresnedas y robledales, higueras y piornales, castañares y olivares. En Candeleda hay cancho y praderío, huerta y majada, pan, vino y aceite. En el campo de Candeleda se enseña la glauca del piorno, la alba margarita de la manzanilla, la campánula rosa, morada y azul. En los balcones volados de Candeleda crecen el geranio y el clavel, la albahaca y el botón de rosa francesilla, el fragante dondigo que unos nombran dompedro y otros dicen donjuán, el nardo y el jazmín.

Fiestas

Los candeledanos celebran su tradicional romería, en honor a la Virgen de Chilla, también llamada la “Soberanita”, fiesta multicolor declarada “de Interés Turístico” y a la que acuden miles de personas, el segundo y tercer domingo de septiembre.

El 3 de febrero San Blas. El 25 de julio, la fiesta de Santiago Apóstol, patrón de Candeleda.

Monumento a la cabra hispánica, a la entrada de Candeleda.

Casa típica en la Plaza del castillo.

Casa típica.

“La casa de las flores”, en la Plaza Mayor. Sus ocho balcones están llenos de macetas repletas de flores todo el año. En su interior está ubicado el Museo del juguete.

Portada gótica de la Iglesia.

Calle y casas típicas.

Casa típica, con el rico pimentón a la entrada de la vivienda.

Cesta con pimentón de la anterior fotografía, más de cerca, para que pueda apreciarse mejor el maravilloso aspecto del pimentón de Candeleda.

Escena cotidiana en una típica calle de Candeleda.

Calle y casas típicas.

Calle y casas típicas.

Edificio del Ayuntamiento, de estilo neomudejar, en la Plaza Mayor.

Casas típicas en la Plaza mayor.

Ermita de San Blas. En su interior se hallan los restos de S. Bernardo de Candeleda, abogado contra el mal de la rabia. Santo no canonizado por la Iglesia católica, pero sí por el pueblo de Candeleda.

El rollo o picota, del siglo XVI, símbolo de independencia jurídica y administrativa.

 

Piscina natural en la Garganta de Sta. María.

Piscina natural en la Garganta de Sta. María.

Piscina natural en la Garganta de Sta. María.

Piscina natural en la Garganta de Santa María.

Santuario de la Virgen de Chilla, del siglo XVI, situado en un lugar de exuberante vegetación y singular belleza.

El santuario erigido al culto y devoción de la patrona de Candeleda, fue objeto de la atención por parte de destacados literatos españoles, como Pío Baroja, quien lo cita en su obra La dama errante,  y Camilo José Cela, en Judíos, moros y cristianos.

La Casa del santero. Una vivienda de marcado carácter popular.

Interior del templo.

Retablo con las tablas de S. Domingo de Guzmán, Santísima Trinidad, S. Francisco de Asís, Sta. Teresa de Jesús y S. Pedro de Alcántara.

La Virgen de Chilla.

Uno de los cuadros de la ermita que representa la aparición de la Virgen al pastor Finardo, en el lugar donde posteriormente se construyó el santuario.

Jardín al lado de la ermita

Jardín al lado de la ermita

Jardín al lado de la ermita

Jardín al lado de la ermita

Jardín al lado de la ermita

Jardín al lado de la ermita

Fuente al lado de la ermita

Flores del jardín